Mientras asiste a la subasta de lingotes y monedas del oro del SS Central America, rescatados del fondo del océano por uno de sus más famosos colegas, Francisco Rayo advierte que lo han estado vigilando desde que llegó a Nueva York. Todavía ignora que está a punto de emprender una de sus aventuras más audaces y temerarias: una aventura que lo sumergirá en las peligrosas aguas del Caribe en busca de una fortuna incierta.