Este cuadro capta la energía de un mercado de flores en la emblemática calle de Barcelona. Las pinceladas vivas y los colores brillantes dan vida a la bulliciosa escena, donde las hileras de puestos de flores están rodeadas de árboles y peatones. El encanto y la calidez de un día soleado en el corazón de la ciudad. Óleo, lienzo. Firmado. Barnizado.