En este libro, Richard A. Clarke ofrece una visión interna de la guerra de Estados Unidos contra el terrorismo. Clarke, quien fuera asesor de seguridad nacional durante las administraciones de Clinton y Bush, critica las políticas antiterroristas pasadas y presentes de Estados Unidos. El autor plantea preguntas cruciales sobre la seriedad con la que se está abordando la amenaza de Al Qaeda y las posibles consecuencias de no detener los ataques terroristas. Con extractos de su testimonio público y corroboración del Informe de la Comisión del 11-S, Clarke invita a los lectores a reflexionar sobre las decisiones tomadas y las que aún deben tomarse para proteger a Estados Unidos de futuras tragedias.