Mel Ashton, una mujer trabajadora y responsable, está cansada de su imagen. Aburrida de su piso y exasperada por su trabajo, Mel está pensando en hacer algunos cambios en su vida. Lo único que no planea dejar es su relación con David. El problema es que a David, un artista talentoso, le gusta Mel tal como es. Le gusta su enfoque racional de la vida. Está impresionado por su ambición, y su presencia tranquila proporciona el antídoto perfecto a su inestable intensidad. Con Mel, David finalmente está creciendo, e incluso está superando su obsesión adolescente por las mujeres llamadas Laura.