Este libro, escrito por Carlos Díaz Hernández, es una invitación a la reflexión y al crecimiento personal. A través de sus páginas, el autor nos anima a prestar atención a los encuentros fortuitos en la vida, a descubrir el sentido oculto en cada experiencia y a no descuidar nuestra conexión con la realidad. Nos recuerda que la sabiduría se encuentra en el silencio y la contemplación, en la capacidad de olvidar lo innecesario y de vivir en plenitud y vacío. Una obra que invita a la presencia y a la ausencia, a la plenitud y al vacío.