En 'Si Yo Debiera Morir', la agente del FBI Lucy Kincaid y su novio, el investigador privado Sean Rogan, se dirigen a las montañas Adirondack para una escapada romántica. Sin embargo, se desvían para ayudar a unos amigos que regentan un resort y están siendo víctimas de sabotajes. Tras perseguir a un pirómano en una mina abandonada, Lucy descubre los restos de una víctima de asesinato perfectamente conservados. La desaparición del cadáver lleva a Lucy y Sean a descubrir una conspiración violenta que los ciudadanos de Spruce Lake parecen decididos a mantener oculta. Con la ayuda del agente del FBI Noah Armstrong, Lucy y Sean deben desentrañar la verdad antes de que se conviertan en las próximas víctimas.