Alejandro, un hombre sencillo y anónimo, se enfrenta a la soledad en un asilo, añorando a sus hijos Luis y Juan. Consciente del final de su vida, decide impartirles una última lección. Para acceder a su herencia, deberán leer un diario que ha escrito pacientemente durante sus últimos años. A través de estas páginas, Alejandro espera que sus hijos comprendan la vida de su padre y sus antepasados, un legado de amor, unión, dignidad, respeto y trabajo a lo largo de varias generaciones. Esta conmovedora novela explora los lazos familiares y el legado que dejamos atrás, invitando a la reflexión sobre la importancia de los valores y el impacto de nuestras acciones en las generaciones futuras.