En el corazón de París, extraños círculos de tiza azul aparecen misteriosamente en las aceras, conteniendo objetos insólitos. El inspector Jean-Baptiste Adamsberg, con su peculiar intuición, es el único que ve en estos círculos una señal de peligro inminente. Cuando un cuerpo es encontrado dentro de uno de estos círculos, Adamsberg se enfrenta a un caso que desafía la lógica y lo adentra en un laberinto de pistas desconcertantes y oscuros presagios. Ganadora del premio Duncan Lawrie International Dagger de la Crime Writers' Association, esta novela es el primer libro de la serie del comisario Adamsberg, uno de los personajes más atractivos de la ficción detectivesca contemporánea.