En la encantadora región de Dordoña, Francia, el jefe de policía Bruno Courrèges se enfrenta a un caso del pasado que resurge con la exhumación de un esqueleto. Treinta años atrás, el jefe de detectives Jalipeau nunca resolvió el caso de un joven hallado en el bosque. Ahora, Bruno deberá desentrañar los secretos de este crimen olvidado, mientras lidia con la gastronomía local y los pintorescos personajes de la zona. Una novela de misterio que captura la esencia de la campiña francesa y sus intrigas.